Una de las cosas que siempre pensamos es que hay tiempo para todo, y que las estaciones son largas, pero esto no siempre es cierto y hay mucho eventos estacionales que son mucho más rápido.

 

Esa foto es un montaje de las siguientes fotos:

La diferencia entre estas dos fotos es de solo 10 días. En la primera las hojas están verdes y empiezan a amarillear, en la segunda el proceso se ha completado. Esto, en tiempo de una persona que trabaja son dos fines de semana, cuatro días en los que pasamos de un extremo a otro., y eso suponiendo que se pueda disponer de todos esos días.

Esta es la principal razón por la cual si nos gusta la fotografía de naturaleza lo primero es estudiar y lo segundo es organizarse una agenda (cosa complicada si no vives solo, hay que hacer vida social). Y, a todo esto, sumarle que no todos los años los cambios se producen en la misma época. Heladas, veranos tardíos, otoños tempranos, estaciones adelantadas…. Para conseguir estas fotos, o tenemos mucha suerte o nos toca entender el medio en el que nos movemos.

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