Normalmente la gente se refiere al Riofrío por el palacio, residencia de verano de algunos reyes españoles y lugar que escogió Alfonso XII durante el luto de su esposa, María de las Mercedes de Orleans, posiblemente la muerte más cantada de la historía de los reyes de España.
Dónde vas, Alfonso XII,
dónde vas triste de tí?
Voy en busca de Mercedes
que hace tiempo no la ví.Ya Mercedes está muerta,
muerta está, que yo la ví,
cuatro duques la llevaban
por las calles de Madrid..
.
.
Pero hay otra cosa por la que merece la pena visitar Riofrío, y no solo el palacio, si no el encinar que lo rodea: sus gamos. Y por uno en particular, el gamo albino.
Recuerdo que de pequeño, cuando veraneaba en la vertiente segoviana de la sierra de Guadarrama me llevaron alguna vez a ver los gamos. En esa época creo recordar que el acceso a la finca era gratuito, y que se les podía dar pan. Estos se acercaban al coche y seguro que si hubiera sido algo popular en la época, tendríamos más de un retrato de pasajero más gamo (imagino que si buscamos alguno saldrá).
En la actualidad hay uno de ellos que es diferente, el blanco, albino.
Dado que en la actualidad no se caza en la finca (solo se sacan ejemplares para repoblar otras zonas), los animales no se asustan ante la presencia humana, pero dado que hace años que no se les alimenta desde los coches, simplemente los ignoran.
Hoy en día no solo está prohibido darles de comer, si no también bajarse del coche, por lo que hay que tener suerte y esperar que el rebaño pase junto al camino de acceso (recomiendo entrar por la puerta que da a Segovia) , teniendo la cámara a mano y siempre con cuidado de no molestar al resto de visitantes de la zona, los cuales tienen el mismo derecho a disfrutar de la zona.
Comments